El estrés aunque forma parte de nuestros días, puede afectar a tu salud si no lo mantienes a raya. ¿Sientes que eres de las personas que se encuentra bajo constante estrés o conoces a alguien con un estilo de vida similar? Continúa leyendo este artículo.

Aprende a reconocer los síntomas de alto estrés

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El estrés excesivo puede dar origen de manera silenciosa a muchos malestares anímicos y físicos, por eso es indispensable saber identificarlos:

Menos energía y más insomnio

Con el tiempo, el estrés prolongado puede conducir a una fatiga crónica y cambios drásticos en tus momentos de descanso.

En este estudio realizado a 7000 adultos trabajadores, se pudo evidenciar que la fatiga estaba estrechamente relacionada con el estrés producido por el trabajo. Aquí puedes leer la investigación completa.

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Adicional a esto, otros estudios como la revisión realizada por el Journal of Sleep Research en 2018, confirmó que la preocupación y rumiación están asociadas al estrés, y que con el tiempo, se corre el riesgo de sufrir insomnio. Lee el artículo aquí.

Disminución de la líbido

Los largos periodos de estrés también pueden afectar el deseo sexual. Esto se demostró en un pequeño estudio realizado a 30 mujeres, que evaluó su líbido durante momentos de estrés y lo comparó con los resultados que obtenían viendo una película erótica. Quienes estaban en etapas de estrés crónico manifestaron menos deseo sexual en comparación a aquellas que estaban más relajadas. Link al estudio aquí.

Incluso, la pandemia y toda la preocupación detrás de esta situación mundial produjo que el 45% de las 1000 mujeres encuestadas tuvieran una reducción en su líbido a causa del estrés. Lee aquí este estudio.

Depresión

Además de la historia familiar, el envejecimiento, factores ambientales, medicamentos o enfermedades, el estrés crónico también puede causar episodios depresivos y son muchos los estudios que sustentan esto.

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Este análisis, de 816 mujeres con depresión mayor encontró que sus síntomas estaban relacionados con el estrés agudo y crónico.

Y esta otra investigación determinó que los altos niveles de estrés originan depresión en los adolescentes. Artículo completo aquí.

Acné

Se piensa que durante los períodos de estrés las personas tienden a tocarse frecuentemente la cara, lo que facilita la propagación de bacterias y aumenta el acné.

Sin embargo, aún se requiere un poco más de investigación para confirmar la relación entre el acné y el estrés.

Dolor de cabeza

Muchos hábitos están relacionados con el dolor de cabeza, como la falta de sueño, el consumo de alcohol o tu dieta; sin embargo, en estudios como este se demostró que al aumentar la intensidad del estrés elevó la cantidad de días con dolor de cabeza al mes.

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También en esta encuesta realizada a miembros del servicio militar, se descubrió que un 67% de sus dolores de cabeza fueron provocados por el estrés, siendo estas situaciones el principal desencadenante de sus malestares.

Dolores crónicos y otras enfermedades

Por un lado, el dolor crónico suele estar relacionado con los altos niveles de estrés, especialmente al elevarse el cortisol (la hormona del estrés).

Según este estudio, las personas con dolor crónico, tenían niveles de cortisol más altos. Y en esta pequeña investigación, las personas con dolor de espalda crónico también se les detectó un incremento en la hormona cortisol.

Y por otro lado, se conoce que el organismo humano es más susceptible a infecciones cuando atraviesa etapas fuertes de estrés. En un estudio realizado en 116 adultos mayores que fueron vacunados contra la gripe, se identificó que las personas con estrés crónico tenían una respuesta inmune debilitada. Lee más aquí.

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También en otro análisis de 27 estudios sobre el estrés, se halló una relación entre este estado de ánimo y una mayor posibilidad de sufrir infecciones respiratorias. Lee aquí el análisis.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que detrás de estos padecimientos también pueden haber otros factores como el envejecimiento, un mal descanso, lesiones o una dieta baja en nutrientes.

Cambios en el apetito y problemas digestivos

El estrés está asociado con problemas digestivos como acidez, estreñimiento, diarrea y otros trastornos digestivos. Y especialmente las personas con enfermedades inflamatorias intestinales (EII) o con síndrome del intestino del intestino irritable (SII) son los más afectados por el estrés

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En un análisis de 18 estudios sobre el papel del estrés en la enfermedad inflamatoria intestinal, se encontró en el 72% de los estudios una relación entre el estrés y los síntomas negativos. Lee el análisis completo aquí.

También se descubrió una conexión directa entre los síntomas del SII y el estrés en este estudio del 2017. Allí también se señala que los niveles de estrés son determinantes en la aparición y empeoramiento de los síntomas digestivos.

Y si hablamos del apetito, es posible que te encuentres con alguno de estos dos extremos: comiendo muy poco o comiendo en exceso, lo que posteriormente hará que tu peso fluctúe.

Tips para reducir el estrés

No puedes evadir el estrés completamente, pero sí puedes hallar en cada uno de tus días pequeñas actividades o ejercicios que te permitan despejar tu mente y hacerte sentir mejor.

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Estas son algunas de mis recomendaciones:

  • Medita: es una práctica que te ayudará bastante a liberarte y aprender a manejar el estrés en el corto plazo. Puedes incluir ejercicios de respiración, atención plena o mantras.
  • Relaja tus músculos: puedes hacerlo apretando y relajando cada uno de tus grupos musculares.
  • Da un paseo: ir a caminar un rato te ayuda a cambiar de escenario, y por lo tanto un cambio en tu estado de á
  • Recibe un abrazo de un ser querido: esto contribuye con la liberación de la hormona oxitocina, que aumenta los niveles de felicidad y disminuye el estré
  • Organiza una dieta balanceada: evitar comer según tus emociones, eligiendo los alimentos más ricos en grasas y ricos en azúcares que solo te dan satisfacción en el momento pero a largo plazo desmejoran tu salud. En lugar de eso, enfócate en todos aquellos ingredientes y comidas que te brindan nutrientes para mejorar tu estado de ánimo y mantenerte lleno de energí
  • Ten un diálogo interno positivo: evita ser duro contigo mismo y autocriticarte. No te insultes, no te alteres más de lo que ya está Sé compasivo contigo mismo y anímate a no rendirte ante la situación que estés atravesando.
  • Expresa gratitud: cada día hay tantas cosas por agradecer y que parecen ser invisibles a nuestros ojos. Agradecer te permite reconectar con todo lo bueno que tiene la vida, y al mismo tiempo te ayuda a darte cuenta que tienes muchas herramientas con las que puedes enfrentar esta situación de estrés sin deteriorarte.

Infusiones para el estrés

Puedes probar estas infusiones para reducir tu estrés

Manzanilla

Tradicionalmente se utilizaba la manzanilla para aliviar problemas estomacales e intestinales, ya que la ansiedad y estrés puede agravar los síntomas en las personas con síndrome de intestino irritable tomar infusiones de esta planta diariamente ayuda mucho a calmar los malestares.

 Romero

Los compuestos del romero ayudan a reducir la inflamación, prevenir las úlceras y mejorar la salud del cerebro.

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Valeriana

Se utiliza frecuentemente para mejorar la calidad del sueño y también bloquea una enzima que interfiere con la función GABA, lo que facilita la sensación de calma.

 Lavanda

Esta planta suele utilizarse en aromaterapia para la relajación. Además, en un estudio realizado a 60 adultos mayores se descubrió que beber infusión de lavanda en las mañanas y las noches ayudó a los participantes a reducir la ansiedad y la depresión. Lee más sobre esta investigación aquí.

 Menta

Ayuda a aliviar el estreñimiento, fortalecer el sistema inmunológico, mejora la concentración y reduce el estrés.

Ejercicio para aliviar el estrés

Hacer actividad física te brinda miles de beneficios, también es esencial para aumentar tu energía, mantenerte positivo y calmado. Lo mejor de todo es que casi cualquier tipo de ejercicio puede ayudarte a alcanzar tus objetivos y al mismo tiempo desestresarte. Por ejemplo:

  • Caminar
  • Trotar
  • Andar en bicicleta
  • Nadar
  • Bailar
  • Subir escaleras
  • Practicar jardinería
  • Entrenar con otras personas

Básicamente cualquier actividad que te ayude a poner tu cuerpo en movimiento, que libere tu mente de los pensamientos negativos y el estrés funciona.

¿Estás listo para comenzar a manejar el estrés de una manera más efectiva? ¡Espero que estos consejos te sean de gran ayuda!

Diego De Castro

Diego De Castro

Dietista Nutricionista y Coach de Nutrición

Soy experto en alimentación saludable y me dedico a ayudar a personas motivadas a generar nuevos hábitos que les permitan mejorar su calidad de vida y su salud.

Mis 10 años de experiencia en consulta y mi formación en coaching nutricional me han ayudado a implementar técnicas cada vez más eficaces.

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